miércoles, 27 de junio de 2018

EN BUSCA DEL FÓSIL PERDIDO, SANTA MARINA DE TORRE 2018, LEÓN

Programa de actos y cartel informativo

      Se pone en marcha al tercera edición de "EN BUSCA DEL FÓSIL PERDIDO" que se celebra en la localidad de Santa  Marina de Torre y perteneciente al ayuntamiento de Torre del Bierzo, León.

      La asociación Mineralógica Aragonito Azul, el INGEMI y la Junta Vecinal de esta localidad ofrecemos una experiencia inolvidable en la cual podrán disfrutar desde los más pequeños hasta los mayores.

     Un día completo lleno de sorpresas y de buen ambiente observando fósiles de mas de 300Ma de antigüedad y una geología única en la comarca del Bierzo.

Ánimo y unete a nuestro grupo de investigadores.
   
Así son las cosas y así se las hemos contado.






jueves, 21 de junio de 2018

TALLER "TOCA TOCA" COLEGIO VALENTÍN GARCÍA YEBRA, PONFERRADA, LEÓN.

     Finalizamos el curso escolar con la presentación del último taller "TOCA  TOCA" que va dirigido a niños a partir de 5 años, en esta ocasión es el colegio Valentín García Yebra el que solicita nuestras actividades de nuevo y que como centro escolar en un referente para nosotros en solicitarnos la variedad de talleres que disponemos en nuestro museo.

Primer grupo

     Poco hay que decir de la aceptación de Toca Toca ya que se ilusionan e interactuan desde la primera presentación mineral, sin duda nuestros primeros investigadores.

Segundo grupo

Así son las cosas y así se las hemos contado.

nota: las imágenes han sido realizadas por nosotros previa autorización del centro escolar para su exposición.

martes, 5 de junio de 2018

CABO ORTEGAL EL PRINCIO DE LA TIERRA 2ª PARTE



San Andrés de Teixido “vai de morto quen non foi de vivo”, con este famoso dicho empezaremos el prólogo de esta aventura. Desde Teixidelo, muy cerquita de San Andrés podemos ver nuestro primer objetivo, la “playa negra”, famosa a nivel mundial por ser la única de arena negra de procedencia no volcánica.

Comenzamos la ruta desde un majestuoso cruceiro, una de las descripciones de ellos es la siguiente Cruz de piedra, de dimensiones variables, que se coloca en el cruce de caminos y en los atrios. Suele alzarse sobre una plataforma con peldaños y tiene esculpido el crucifijo y, frecuentemente además, la Piedad o Quinta Angustia. Abundan en Galicia, Irlanda y Bretaña”. Al lado de la iglesia de San Roque se encuentra el conocido como “Cruceiro de Melide”, el que para muchos es el más antiguo de Galicia, probablemente del siglo XIV. El anverso representa a un Cristo Majestad sediente, mostrando las llagas de las manos y con un paño que le cubre las piernas. El reverso representa un Calvario. Es probable, aunque no existe documento alguno que lo pruebe, que las órdenes mendicantes contribuyesen a la expansión de los cruceiros gallegos ya que muchos de ellos forman parte de los Vía Crucis. Los cruceiros son levantados por devotos, normalmente un matrimonio o alguien con poder o dinero. Los nombres de éstos suelen estar grabados en las bases.

Una vez llegados a la playa y después de una bajada tortuosa, vertiginosa y larga, pero no exenta de belleza y unas vistas del mar bravo, relajante e impresionante. Como suceso importante e interesante de los restos de un naufragio; lo pondremos tal como lo he hallado en un artículo de Internet:

Cerca del lugar donde se halló el pecio del Don Segundo Sombra se encuentran los restos del Bonnie Carrier, un mercante que el mar lanzó contra las piedras a la altura de la aldea de Teixidelo. El naufragio tuvo lugar en 1986. Entonces, la firma coruñesa Recuperaciones, Desguaces y Salvamentos (Redesa) «lo adquirió y achatarró parte de su estructura en el mismo sitio del encallamiento». El hierro fue adquirido por la fábrica Megasa, en Xuvia. 

Las pruebas efectuadas en una de las dos hélices [de 20 toneladas de peso cada una] demostraron que había sido construida con la mejor aleación (cunial). «Fue enviada a la fundición Navalips, en Maliaño, Cantabria», cuentan fuentes de Redesa. El Bonnie Carrier era «un barco cementero: «Se arrimaba a un buque con cemento a granel, lo absorbía y lo ensacaba», recuerdan. También iba de remolque. Para bajar hasta el barco, por tierra, fue necesario abrir 2,5 kilómetros de pista, que costó 22 millones de pesetas (132.000 euros).

Una vez que dimos cuenta de los bocadillos encargados en Cedeira y ante este restaurante marino con el rumor de las olas como acompañante musical, nos pusimos en camino para la ardua ascensión que nos esperaba. 

Ante las adversidades, -como ha sido el caso de una incidencia con un participante de la excursión que le dio un bajón de azúcar y le provocó una dificultad  para caminar-, hemos respondido todos con gran solidaridad y compañerismo; agradecer a todos el buen comportamiento, sobre todo a los maratonianos que con el cansancio acumulado se apresuraron a subir en busca de la persona que transportaba el botiquín y bajar las pastillas de glucosa correspondientes.


Aún nos quedarían fuerzas para hacer una parada en la garita de Herbeira, pero debido a una densa niebla no pudimos apreciar las vistas de los acantilados, los más altos de la Europa continental; no obstante recogimos algunas muestras de rocas y minerales en una cantera cercana. Nuestro último  objetivo fue el faro de Cabo Ortegal, unión del Atlántico y el Cantábrico,- aunque siempre se nos ha enseñado que es el cabo de Estaca de Bares-, pudimos admirar las rocas que forman los majestuosos Punta de Os Aguillons, formados por la eclosión de eclogitas, rocas raras y escasas en la corteza terrestre, -puesto que se forman a más de 40 Km de profundidad- y más extensas del mundo, pudimos observar algunos barcos faenando en busca del preciado percebe con las dificultados que eso entraña (y luego dicen que el marisco es caro).

Como colofón y punto final a estas jornadas de aventura, recalamos en la playa de Fornos, donde Francisco nos dio las últimas explicaciones de las formaciones de minerales (granate, piroxeno, magnetita y anfíbol)  de esta curiosa playa cercana a Cariño. Allí nos despedimos de su exquisita compañía y retomamos rumbo a nuestro Bierzo.

Han sido dos jornadas intensas y de imborrable recuerdo, acaecidas en armonía y buena compañía.



Amontonamiento de piedras, algo parecido a la Cruz de Ferrol.

Todo  dispuesto para iniciar la ruta...

Aparcamiento, al lado de la cruz de Teixidelo y principio de la ruta a la playa negra.
Suave ascenso al elegante cruceiro de Teixelo.

      Francisco nos muestra al pie del cruceiro de Teixidelo  unas granulitas, roca metamórfica intermedia a ultramáfica y que según sus datos se formó a altas temperaturas, unos 700ºC  y profundidades que van desde los 10 a 45 km.

Añadir leyenda
       Esta roca está constituida por plagioclasa, granate, piroxenos y anfiboles aunque de forma esporádica también podemos encontrar rutilo, cianita, titanita o epidota.






     Observamos en esta imagen de estas granulitas un pequeño estrato de granate marcado entre las dos flechas








       Bien pertrechados, de mañana el aire era bastante fuerte y la sensación térmica nos obligaba a protegernos.
Cruceiro de Teixidelo




Desde el cruceiro, Francisco nos seguía mostrando mas etapas geológicas y materiales rocosos que nos rodeaban, nos sorprendió cuando citó que en tiempos pasados la linea de costa estaba 15km mar adentro, es decir la linea de mar que se observa mirando en la lejanía.










     Un vez terminadas las explicaciones del geólogo iniciamos la aventura que tanto llevamos esperando, la playa de arena negra y la mina Manolita.


















     Descendiendo por la pequeña senda pasamos por pequeños retazos únicos que nos muestran la belleza de esta tierra y su riqueza en geodiversidad, este pequeño arroyo era acompañado por otros que en su unión vertía las aguas a un molino que estaba en desuso y casi derrumbado









 
        Durante el descenso realizábamos paradas técnicas y de reposo donde dejábamos que el grupo se unificara y Francisco nos pudiera seguir informando de todo lo importante que nos rodeaba.

Parada técnica y de descanso
Francisco nos realiza una comprobación básica entre caliza y cuarzo con ácido
      Esta área de relax nos ha servido para conocer un pequeño dique de carbonato (calcita espática) que asciende de manera vertical entre las granulitas de este entorno.

Calcita espática
     También existe algo curioso en este entorno de carbonatos, y es la existencia de una planta que en muy pocos sitios se puede encontrar, nos referimos a "Erinus Alpinus" o comunmente citada como Siempreniña y que mostramos en las imágenes de abajo.


 
        Hemos podido recoger información y esta planta alpina suele aparecer en fisuras, repisas o graveras, casi siempre en roquedos calizos, tiene un nombre mas común,   "Siempreniña", no le gusta la sombra, aguanta variaciones de temperaturas elevadas, aguanta la sequedad extrema por lo que es un indicador de lo citado, indicadora de suelos ricos en bases



Siempreniña (Erinus Alpinus)


        La Siempreniña es una especie distribuida por varias localidades de España y en montañas calcáreas y conglomerados.
 En nuestra provincia la encontramos en más de una docena de localidades de media y  alta montaña, lo mas cerca de nosotros que existe evidencias de esta planta es en Rubiá en la orilla derecha del río Síl, junto y por debajo del embalse de Peñarrubia, provincia de Orense.



 

     
       Seguimos descendiendo hasta la base de este acantilado, hay momentos en que el grupo se estira y cada uno plantea sus recursos y conocimientos en la montaña, eso sí con seguridad.

Descendiendo hasta playa negra y mina Manolita


      Llegados a otro punto de interés, vemos dos frentes geológicos delimitados por un plano de falla en el que se encuentra un filón de cuarzo separando rocas ultramáficas serpentinizadas y las granulitas de la parte derecha de la imagen de arriba.  Los crestones que se asemejan a afiladas agujas están marcados por flechas en la foto y que son visibles desde el sendero.

     Una vez pasado el filón Francisco nos informa que  las rocas son negras y verdosas y que son los últimos materiales del macizo de rocas ultramáficas de Herbeira. El valle por el que discurre la falla tiene un perfil en U y del cual nos ocuparemos en el siguiente apartado.

     Nos acercamos a la base de este acantilado que nos sorprendía cada vez más por todo lo que Francisco nos iba relatando a través del sendero de bajada.

Abajo, ruinas de una instalación o casa minera, mina Manolita
     Un vez abajo no podíamos imaginar ni visionar que al  llegar a este valle de la foto de abajo, que estaríamos encima de una lengua glaciar del cuaternario y de unas morrenas o frentes morrénicos que nos trasladaban a periodos gélidos entre 40.000 y los 60.000 años de antigüedad y además a la orilla del mar, impensable en la península Ibérica.

     La foto nos muestra este frente morrénico en el  que se asienta sobre depósitos caóticos arcillosos, también se detectan morrenas laterales y frontales.

Valle con modelado glaciar por el que transcurre la falla de Teixidelo


    Base del  valle glaciar donde están depositados enormes bloques de roca, granulitas y ultramáficas serpentinizadas que están asentadas y consolidadas sobre arcillas, esta circunstancia hace que sea muy  inestable este frente morrénico con deslizamientos  continuos del orden de 0.4 m/año. debido a la plasticidad de las arcillas al hidratarse, así nos los cuenta Francisco




 
   
        La imagen de abajo nos indica las marcas de rozadura o estrías del movimiento y abrasión  de rocas que se encuentran entre el hielo  durante  el desplazamiento de toda la lengua glaciar, la dirección de las estrías nos indican la dirección de la lengua glaciar, otra evidencia de la geomorfología pasada y presente.
Estrías paralelas, resultado del avance de una lengua glaciar.

     Desde hace  10 años la paleobotánica esta siendo en nuestra asociación otro revulsivo en nuestras salidas de investigación, en este campo no puede estar disociada la botánica ya que es pieza fundamental en el estudio de la flora fósil de nuestro entorno y en el caso que nos referimos a la comarca del Bierzo que es un referente en hallazgos tanto a nivel cualitativo como cuantitativo.

Equisetun telmateia
       Haber encontrado este pequeño bosquecillo de estos equisetos nos traslada a tiempos de 300Ma de antigüedad, si nos fijamos en la imagen de arriba  es una simulación en formato diminutivo de lo que pudo ser una zona lacustre, simulando calamites, la imaginación al poder...

       El ojo humano desea plasmar en la fotografía la belleza que nuestro entorno nos muestra, cada uno de nosotros busca esa foto que nos traslade fuera de la realidad, de lo que estamos seguros es que en muchas de las imágenes que mostramos en los dos reportajes lo hemos conseguido y merecen muchas de ellas un reconocimiento de nuestra Asociación hacia los que nos hacen  participes  de estas imágenes, los cardos parece que no tienen nada que enseñar y si encima los nombres son y citamos el de la imagen, cardo borriquero, cardo cuajaleches, cardo de burro etc.

Bellísima imagen de este flor de Cardo, cardota, galactites tomentosa- centaurea lechosa
      Su floración es de abril a junio, cardo muy extendido por la zona sur de la península Ibérica, crece a orillas de los caminos, carreteras y  escombreras, crece en zonas calizas se encuentra a altitudes a nivel del mar llegando a los 800 metros y no aguanta la sombra ni las altas temperaturas.

En busca del salto de agua o catarata...


Teníamos que verlo todo.



    Caminado al encuentro del salto de agua que vierte su agua  al mar directamente  y del que no siempre se puede ver con toda  su belleza dependiendo de la estación del  año ya que es alimentado por arroyos locales








 
    Teníamos ganas de llegar aunque no todos ascendieron hasta el punto más alto desde el cual poder disfrutar del  salto de agua, el viento que soplaba de manera intensa dificultaba la subida y con peligro de ser arrastrado hacia el acantilado así que pocos llegaron arriba, una pena pero la seguridad  y prudencia imperaba en muchos de los asistentes, no obstante desde abajo también se podía visionar perfectamente la catarata.






   Carlos fue de los primeros que ascendieron a la cota mas alta seguido de Chema, Camilo, Jorge, Juan, Jose
















   Son 50 metros de caída casi a plomo de esta catarata  pero vertiendo sus aguas de manera directa al mar, sabemos de otras parecidas como la de cerca del Faro de Cabo Ortegal aunque pocas veces se ve con agua, suponemos que dependiendo de la pluviometría tendrá caudal, una imagen preciosa de esta costa Gallega.
Desde esta posición la ventisca era importante y teníamos que tener cuidado donde poníamos los pies y donde nos posicionábamos.








      El viento hizo de las suyas, la tensión se palpaba en los rostros de Carlos y Jorge ya que la ventisca los empujaba hacia el acantilado, al final sobraba el gorro de Carlos...



Encima de la morrena y la caseta minera
     Estamos al lado de la cabaña que utilizaban los mineros que trabajaban en mina Manolita, esta pequeña explotación minera se beneficiaba de níquel  y en ella se encontraron las mineralizaciones de carbonatos y sulfatos de níquel, la zaratita y la morenosita.

    Esta cabaña esta  encima de la parte final de la morrena, que como nos había indicado Francisco se mueve todos los años varios metros hacia el mar, sabemos que  desde el año 1956 la cabaña se ha desplazado unos 25 metros en pocos años estamos seguros que desaparecerá en las aguas del Atlántico.







    Teníamos que seguir nuestro camino todavía nos quedaba mucha materia, la playa de arena negra, bocamina de mina Manolita y el trago duro, la ascensión.













   Eugenia, Martín, Del Río, Encarnación, Ana, Jorge, Estefanía, Bernardo, Mónica, todos en busca del arca perdida...





   En el descenso hacia la playa negra pasamos por otras zonas de playa, donde se podía ver de forma real los materiales arcillosos que son los culpables de  que se desplace todo el material morrénico que descansan sobre ellos.







   Nos detuvimos también en unos bloques (conglomerados) compuestos por una cementación silícea y clastos angulosos de distintos tipos de rocas, en esta parada Francisco nos explicaba sobre el conglomerado como fue su formación y composición.
Conglomerado con cementación silícea y distintos tipos de rocas.


       Esta parada nos llevaba al final del valle y de la morrena, las arcillas existentes se mezclaban con clastos pequeños de distintos materiales rocosos, las mineralizaciones que pudimos observar  fueron sulfuros (pirita cúbica, en algunos casos biselada) esteatita (talco) actinolita y serpentina, no nos dio tiempo para más.

     Multitud de materiales ferrosos, maderas, boyas, trozos de tuberías etc es el resultado de los numerosos naufragios que pesqueros y barcos que pasan por estas costas y acantilados sufren por la bravura de estas aguas y los temporales de invierno. Según nos comenta Francisco en muchas ocasiones y con fuertes temporales las olas de casi 15 metros rompen de una manera casi demoledora contra las paredes de este acantilado.

    Estos restos corroídos por el salitre y el continuo azote de esta aguas le dan a esta playa negra un aspecto casi sobrecogedor dándole más belleza al entorno. Detrás de Francisco arrastre de acantilado que ha dejado a la vista una antigua galería minera. 

Hierros retorcidos por la fuerza de oleaje y la alteración.

   Este invierno y como vemos en la imagen de abajo a aparecido restos de  una galería de la mina Manolita en pleno acantilado, nos imaginamos las olas azotando estas paredes hasta derrumbar sus laderas.




     Las labores de esta pequeña explotación minera, mina Manolita no constituía más que dos galerías de poco más de 20 metros de largas, una de ellas con algún socavón transversal de 4 metros como máximo, los derrumbes continuos y los colapsos de este acantilado  hacen inaccesible su visita o investigación por el peligro que conlleva la exploración, la memoria del Ministerio de Industria Plan Nacional de la Minería Dirección general de Minas, Instituto Geológico y Minero de España refleja  un estudio en el año 1977  "INVESTIGACIÓN MINERA EN EL CABO ORTEGAL" para  Cu-Ni-Cr-Ti y asbestos donde viene reflejado todas las mineralizaciones existentes en estas demarcaciones.



    Si quieres perderte, si quieres olvidarte de los problemas o simplemente camuflarte entre tanta belleza no dejes de visitar este entorno, a veces una imagen vale más que mil palabras y eso es lo que transmite Bernardo, en fin nos hemos emocionado.

Posiblemente la imagen mas bella de la jornada, Bernardo en conexión con el Atlántico y su fuerza.

      Aunque la marea estaba bajando teníamos que buscar un sitio para dar buena cuenta de las viandas que Carmen del Hotel Herbeira nos había preparado para comer. El tamaño de estos bloques es impresionante algunos de ellos con sorpresa como el huevo Kindel

Dando buena cuenta de las viandas en mesas y asientos rocosos.

     No podemos perder tradiciones y Jose Luis bailó la bramadera en este paraje inhóspito y bravo, el ruido del mar y el roce de los cantos al bajar la ola no dejaban oír con detalle el sonido, una mezcla de aire y mar se mezclaba en los movimientos circulares y el bateo de las olas.


     Sonidos ancestrales que la "bramadera" transmite, esta es nuestra esencia y nuestra razón de ser, libertad, camaradería, diversión, generosidad, curiosidad y siempre respeto hacia nuestro entorno.

Danza, bramadera, danza.
      Hemos grabado el sonido que se escucha al mover las olas los cantos rodados de esta preciosa playa, un sonido que adormece entre el craqueo de los cantos rodados.

                                        

   Se acabó, teníamos que abandonar esta maravillosa playa y acantilados, el camino sera duro para algunos pero la fuerza que transmite este sitio hace que sea más liviana la subida.

Ascendiendo hacia Teixidelo. 

      Juan observando la ascensión del grupo, poquito a poquito y pasito a pasito. 600 metros de desnivel  de acantilado en 2.5 km no esta mal.

     No nos olvidemos que esta zona es virgen y que solo existen caminos y sendas que dejan los caballos y cabras que pastan por estos acantilados, además de los que en su día se realizaron para poder bajar al rescate de materiales de los naufragios y de la mina Manolita.

La subida estaba pasando factura, vean el desnivel impresiona.

     Una vez arriba las imágenes se mezclan con el cansancio que sirven de sedante y reposo para nuestras piernas y ojos, será difícil olvidar estos maravillosos parajes y estamos seguros que en algún momento volveremos si no es en esta vida será en la del más allá.

Nunca nos olvidaremos de estas tierras y de sus tesoros.

    Ya nos queda menos en nuestro recorrido geológico, en esta ocasión nos desplazamos a la playa de Fornos perteneciente  al Concello de Cariño, llegados a la playa Francisco nos muestra las características de la arena, una simple ducha de playa sirve para ver de manera in visu como se separan por flotación los distintos minerales que la contienen, nosotros hemos querido realizar una foto macro que nos sirve para ver con mas claridad lo que el ojo no ve, los granos de  color negro a magnetita, los rojos a granate, los verdes a piroxenos, los marrones a anfiboles, los colores blancos al cuarzo y también a partículas de conchas.

Arena de playa de Fornos  al microscopio, impresionante el colorido
       Que fácil es a veces trasmitir  la geología y sus curiosidades si la persona que lo hace lo vive con pasión y disfruta divulgando sus conocimientos como lo hace Francisco, un crack..

Todos atentos a las explicaciones del geólogo Francisco

     La imagen de abajo que nos muestra Francisco refleja las zonaciones minerales que se forman por el desplazamiento y flujo del agua, siendo esta la que separa los minerales mas pesados de los que no lo son, la propia agua del mar hace un trabajo selectivo,  algo parecido al del bateo del oro, algo raro en esta operación es que la magnetita, que es un mineral pesado de hierro, se acumulaba en la parte alta de estos materiales y esto se puede observar en el vídeo que presentamos.









     En el vídeo podemos ver la selección de minerales por la acción del agua

   
      Los minerales se van agrupando, no nos olvidemos que el agua del mar contiene sal y que le da una pequeña densidad  al agua,  al igual que los minerales también la tienen y que sirve para que los minerales se separen formando zonaciones dentro del agua.

Arena de la playa de Fornos en Cariño, A Coruña
       La característica de esta playa es y según nos cuenta Francisco, es que durante el invierno el azote de los temporales y las mareas vivas desplazan las arenas superficiales hasta mar adentro dejando a la vista las partículas minerales más pesadas dándole un color característico a esta playa que  en los meses de invierno se ve de colores rojizos, verdes, marrones y negros, en el verano el mar vuelve a depositar encima de estos materiales la arena blanca compuesta mayoritariamente por sílice, es decir cuarzo y materiales cálcicos como pequeños fragmentos de conchas.

     Estos materiales pesados  que hemos citado anteriormente son  la consecuencia de la degradación que sufren las rocas por la erosión del mar, del agua de lluvia, el viento y como no, el tiempo geológico, todos estos materiales son depositados en esta playa por arroyos cercanos, escorrentías y por el mar en su acción erosiva en acantilados y rocas. 

Playa de Fornos, Cariño, A Coruña

    Según comentan, aquellos que reposan o descansan en sus arenas y después de visitar esta bonita playa  suelen dormir muy plácidamente, posiblemente los minerales sean los responsables aunque ya sabéis, entramos en temas delicados.

    La tarde se apagaba y las nubes y el  viento ponían fin a estos dos días de intenso disfrute y a la vez trabajo, pues a los que sentimos pasión por la geología  han sido dos días de estudio y comprensión de esta maravilla de la naturaleza que es el Complejo Geológico de Cabo Ortegal, incluso para los que  solo son amantes de las vistas y de la naturaleza se han maravillado de los paisajes y de los caminos recorridos, todos ellos con algo que contar y sentir.

   Debemos de agradecer a Francisco Canosa Martínez , doctor en geología y que durante estos dos días nos a hecho disfrutar de la bella Galicia, inculcando en nosotros la pasión que tiene por la geología al trasmitir todos sus conocimientos sobre el complejo de  Cabo Ortegal, gracias por tu paciencia y compañerismo, pero sobre todo no dejes nunca de hacer lo que haces y de la manera que lo sientes, gracias Francisco.

Así son las cosas y así se las hemos contado