La Asociación Mineralógica Aragonito Azul agradece la elaboración de este documento a Rogelio Melendez Tercero, topógrafo, geólogo, investigador y miembro relevante de nuestro organismo, también a Roberto Matías por sus investigaciones en el campo de minería romana del oro en la provincia de León y que nos llevan a un mayor conocimiento de nuestra historia y a una mayor defensa de todo nuestro patrimonio minero.
LAS EXPLOTACIONES AURÍFERAS ROMANAS DE CASTROPODAME
Por Rogelio Meléndez Tercero
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Visión general de la mina de oro de Castropodame. |
Desde hace décadas han sido muchas las personas del entorno de Bembibre y de otras partes del Bierzo interesadas en visitar las llamadas popularmente “Cuevas de Castro”. Se trata en efecto de una serie de “cuevas” excavadas en general sobre rocas muy compactas y que a su vez se hallan en medio de un paraje surcado por numerosos valles. Desde la distancia estos se asemejan a grandes surcos excavados en la ladera, que con su tonalidad rojiza recuerdan a las conocidísimas explotaciones auríferas de Las Médulas. Son ya varios los artículos escritos por mí sobre estas antiguas minas, desde que en el ya lejano año 1.988 logré publicar el primero en la revista Estudios Bercianos (Nº. 7), que editaba y sigue editando el Instituto de Estudios Bercianos (IEB).
Estas antiguas minas en cuestión no habían sido muy estudiadas, o mejor dicho, eran poco conocidas en los medios de difusión más accesibles al público en general. Hasta el punto de que, en el año 1.978, Antonio Díaz Carro señaló en su libro sobre la Historia de Bembibre que no tenía constancia de que hubiesen sido estudiadas. En la actualidad, la situación es diferente. He aquí un pequeño resumen de su conocimiento a lo largo de la Historia.
Orificio de acceso a la mina de interior |
1.-CONOCIMIENTO HISTÓRICO DE ESTAS MINAS
No sabemos lo que opinaban los vecinos de Castropodame hace siglos sobre estas minas. Es posible incluso que muchos las considerasen en gran medida producto de actividad natural o en todo caso obra de los antiguos que en general denominarían “moros”. Una de las galerías se conoce aún con este nombre y así ha sido desde tiempo inmemorial.
En la documentación del Catastro de Ensenada (siglo XVIII), nada se dice sobre la existencia de minas en la localidad (pregunta nº 17 del Interrogatorio General), pero esto no prueba que los vecinos no supieran ya entonces que los valles y galerías que se observan en el paraje de Los Valles y la Encinal son en realidad antiguas minas de oro romanas. En datos del siglo XVIII (año 1.779 p.e.) se habla del paraje de “Peñafurada”, refiriéndose según parece sin duda alguna a lo que actualmente llamamos La Encinal. (1) No las consideraban minas, porque sin duda entonces no se explotaban.
Sin embargo, en las primeras décadas el siglo XIX, al menos los eruditos (Miñano) si hablan de antiguas minas. Lo mismo hace MADOZ, ya a mitad del siglo en cuestión. No obstante, se habla de minas antiguas sin mas. Fue en la segunda mitad del siglo XIX cuando se llevaron a cabo intentos mas o menos importantes de volver a explotarlas. Roberto Matías Rodríguez los está investigando (referentes a Castropodame y a otras partes). Quizá esta es la razón por la que en el siglo XIX se dio el nombre de calle de las Minas a una calle del pueblo, que aún lo conserva. (2) Aunque este aspecto concreto yo no lo he investigado mucho, si tengo constancia de algunos datos al respecto y se por ejemplo que durante el siglo XIX se habla de la Mina La Africana (de cuarzo aurífero) que estaba situada en el paraje de La Encinal. (3) En el año 1.883 (D. José María Soler),se cita una mina denominada California, sita en el término de Castropodame a 4 km. de la estación de ferrocarril de S. Miguel de las Dueñas. Un ejemplar de
“tierras auríferas” procedente de esta mina se escogió por la Jefatura de Minas de León, para ser expuesto, ni mas ni menos, que en la Exposición Nacional de Minería de Madrid, en el año 1883. (4)
En las primeras décadas del siglo XX, de nuevo vuelven a ser citadas por los investigadores. Por ejemplo, el conocido erudito y militar D. Severo Gómez Nuñez, habla de ellas y del hallazgo de una moneda de la época de Tiberio. En una conferencia pronunciada en Madrid el 22 de junio del año 1931 habló de Castropodame, de estas minas, y en las notas publicadas sobre esta conferencia detalla las circunstancias del hallazgo de esta moneda. Según se dice en tales notas la halló D. Faustino Cepedano, maestro de escuela del lugar en las primeras décadas del siglo XX, que a su vez la entregó a un tal D. Valentín González Ballesteros, teniente de la Guardia Civil que tenía una casa en Castropodame, (aún se conserva esta casa), el cual, a su vez, la hizo llegar al conocido militar berciano D. Severo Gómez Núñez. (5) A estas alturas de la historia ya se atribuía a los romanos la autoría de tales minas. Creo que el historiador Augusto Quintana Prieto también las cita en alguno de sus estudios en los años centrales del siglo XX. Durante los años 50 y 60 de este pasado siglo, y por lo que yo recuerdo, el maestro de la escuela de Castropodame en alguna ocasión citó a estas minas atribuyéndolas a los romanos; pero en aquella época la inquietud cultural en Castropodame, no era aún suficiente para valorar el aspecto histórico y cultural de estas minas. En general se las miraba como una potencial fuente de riqueza económica (la explotación del oro).
El estudio de las mismas desde el punto de vista histórico o como patrimonio cultural (al margen del mítico interés económico), no comenzó hasta los años 70 del pasado siglo XX. Aunque el primer artículo publicado íntegramente sobre estas minas vio la luz en el número 7 de la revista Estudios Bercianos (1988), creo que con anterioridad ya se hicieron referencias más o menos extensas a estas minas, si bien en el marco de la explotación aurífera romana del NO de la Península Ibérica.
La investigación de esta antigua explotación parece mostrar que, después de 20 siglos estas antiguas minas de oro, aún siguen teniendo cierta repercusión sobre la pedanía de Castropodame. El emplazamiento de su actual núcleo urbanizado, su nombre, su forma, la distribución de los cultivos en su entorno y, por supuesto, algunos restos arqueológicos aún presentes en las paredes de sus casas, son herencia de la explotación romana,….aunque esta circunstancia sólo en los momentos actuales empieza a ser conocida por sus vecinos.
Piedra de molino giratoria |
Mortero de molienda |
2.-DEFINICIÓN.
Este conjunto de excavaciones y movimientos de tierra, como resulta evidente, se trata de una explotación aurífera de la época romana situada al lado mismo del núcleo habitado de Castropodame. Es un ejemplo más de la actividad minera de los romanos en El Bierzo y otras zonas próximas. Como en el caso del complejo minero de Llamas de Cabrera (descubierto en el año 2.002 por Roberto Matías Rodríguez), se trata de una explotación en la claramente se combinan labores de interior (galerías subterráneas) y de cielo abierto (canales y embalses similares a los de Las Médulas). Conviene por ello resaltar que nos encontramos ante una explotación mixta, en la que se combinan dos modos de trabajos diferentes. Por un
lado hay un yacimiento secundario (sobre terrenos blandos y rojizos debido a su fracción arcillosa), beneficiado inicialmente mediante el uso de la energía hidráulica. Además, también se explotó un yacimiento primario (sobre terrenos mucho mas compactos), recurriendo en este caso al empleo de técnicas manuales, como la excavación de galerías en rocas compactas y el arranque y machaqueo del cuarzo aurífero.
Galería en investigación (el Forao) |
Galería de interior de la mina de oro |
3.-MAGNITUD.UBICACIÓN
Aunque la indicación de cifras inherentes a diversos aspectos de la explotación puede resultar un tanto tediosa, entiendo que las cifras son imprescindibles para dar una idea correcta de la magnitud de esta explotación. En este artículo trataré de exponer sobre todo datos no publicados anteriormente o en todo caso expuestos sin la consideración debida. No estimo necesario -en este caso- señalar donde se halla Castropodame, pero si indicar algunas referencias que sirvan para identificar con facilidad estas antiguas minas. Así, para que el lector tenga una idea general, señalo que el núcleo principal de los trabajos efectuados se ubica en los parajes de Los Valles y La Encinal. Cuando el viajero transita por la carretera N-VI o la autovía del NO a la altura de Almázcara, se pueden fácilmente divisar estos parajes hacia el sur, a una distancia de 4 Km en la ladera del monte y al lado mismo de Castropodame, claramente diferenciados del entorno y que recuerdan el paisaje de Las Médulas.
Entre los parajes de La Encinal y Los Valles hay una extensa zona en forma de triángulo, constituida (al menos en superficie) por el terreno que los geólogos denominamos sedimentos del Terciario, que tiene un aspecto rojizo (arcilla) y es mucho más blando que los terrenos en los que se asientan las conocidas como “cuevas”, que no parece haberse removido, quizá porque en ella se asentaba un núcleo de población. Se conoce localmente este paraje, como Llamillas.
En esta zona de Los Valles y La Encinal, paraje en el que –insisto- se halla el núcleo principal y más evidente de la explotación, aparecen junto y por debajo de los terrenos blandos y arcillosos, otros más compactos formados por pizarras y cuarcitas. Aquí se hallan una serie de elementos típicos de este tipo de explotaciones (hundimientos, embalses, canales, galerías, lavaderos, escombreras,….) y, asimismo, otros restos arqueológicos de los que hablaré expresamente más adelante. No obstante, existen también otros elementos del complejo minero (canales o subsidencias mineras por ejemplo) que se pueden contemplar bastante lejos de esta superficie de explotación, estimada en 300.000 m2. Entre estos, uno de los más singulares es un túnel excavado en la roca en el borde meridional del valle de Vendañuelo y ya en el municipio de Molinaseca. Se trata de un túnel similar en sus características geométricas a los descritos por Roberto Matías Rodríguez en la red de canales de Las Medulas, algunos de los cuales fueron citados por Gómez Moreno a principios del siglo XX. Sus dimensiones son suficientes para que, en efecto, por el mismo, tal y como ya apuntara en 1.925-1.926 el investigador Gómez Moreno, puedan pasar vacas. (6) Este túnel está excavado en cuarcitas. En los años 2.006 y 2.009 con la ayuda de Benito Panizo Prada, vecino de Castropodame, realicé sendas visitas al mismo y al entorno en el que se encuentra, tomando una serie de medidas topográficas sobre sus características geométricas y posición. (7)
Asimismo fuera del paraje de Los Valles-La Encinal se hallan restos de la explotación consistentes esencialmente en las escombreras y en los lavaderos.
3.1 MINERÍA A CIELO ABIERTO
Hace ya muchos años (1979 quizá) que, utilizando como base topográfica un plano del I. Geográfico Nacional ampliado convenientemente, realicé un cálculo sobre el volumen de tierra removido. Pocos años después, en 1.983, alumnos de la escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la U. Complutense de Madrid, realizaron de nuevo una cubicación referida al paraje de Los Valles y la Encinal, obteniendo unos resultados concordantes con los míos, que arrojan un volumen total de 2,4 millones de metros cúbicos para el conjunto de este núcleo principal de la explotación, que señalo en el recuadro correspondiente
3.2 MINERÍA DE INTERIOR
En cuanto a la minería de interior, no dispongo de datos concretos, pero si tengo algunos croquis levantados por mí, y a modo de ejemplo, puedo señalar que en la llamada “Cueva del Moro” hay 23 m de galería con sección suficiente para que se pueda transitar de pie por ella (unos 4 m2), un pozo prácticamente vertical de 13 m, de similar sección, y una serie de galerías más, tapiadas por derrumbes internos. En la “Cueva del Corralón” debe haber un mínimo de 100 m de galerías por las que puede transitar perfectamente, pese a que el suelo original de las mismas está cubierto por escombro caído del techo y los hastiales.
Paraje de la encinal en el complejo minero |
Esta fuera de toda duda que deben existir amplios tramos de antiguas galerías y otras labores mineras de interior, que no han podido ser analizadas debido a que resultan inaccesibles. En 20 siglos de existencia, es normal que muchas labores se encuentren afectadas por arrastres y derrumbes. En mi libro sobre la Historia de Castropodame y en la revista del IEB citada (ver bibliografía) figuran más datos matemáticos (canales, embalses, pendientes,…) que cabría incluir en este punto; pero por razones de espacio prefiero remitir al lector a la bibliografía adjunta. Un buen trabajo consistiría en la realización de un levantamiento topográfico de las labores de interior, pero es una tarea compleja,……. y peligrosa.
RESUMEN DE DATOS NUMÉRICOS
- Extensión superficial total del paraje de Los Valles-La Encinal.- 50 Has.
- Extensión superficial de la zona excavada (yacimiento secundario).- 30 Has.
- Volumen de terreno removido (yacimiento secundario).-2,40 x 106 metros cúbicos
- Longitud túnel del Forao.- 10 m.
- Sección túnel del Forao.- 2, 5 m2
- Número de embalses conservados.- 8
- Volumen total de los embalses conservados.- 13.000 m3 (aproximadamente)
- Longitud de canales conservada.- Menos de 5 Km.
- Longitud de lavaderos conservada.- 1,6 Km.
4.- GEOLOGÍA
PALEOZOICO
Desde el punto de vista geológico, y a falta de estudios detallados concretos, en este tipo de yacimientos el oro primario se encuentra asociado a filones de cuarzo en los que también le acompaña la pirita y arsenopirita. Cabe señalar que los filones de cuarzo se hallan inmersos en la denominada Serie de los Cabos en la que predominan las cuarcitas. En los parajes de Los Valles y La Encinal, esta serie se halla en contacto (en general por falla) con las Pizarras de Luarca, que muestran un grado de alteración notable y por ello su típico color negro o azul muy oscuro se ha sustituido por tonos rojizos y blancos. Estas pizarras de Luarca alteradas han sido utilizadas tradicionalmente en Castropodame como canteras para la construcción y los fragmentos rocosos (presentes en muchas construcciones de la pedanía de Castropodame) se conocen localmente como “rajos”. Como datos curiosos añado que en las mismas se hallan abundantes restos fósiles, entre los cuales yo he identificado graptolites.
El hecho de que el oro se halle asociado al cuarzo (cuarzo aurífero), dio lugar a la aparición de unas técnicas de machaqueo (molinos de impacto) y trituración (molinos rotativos), que requerían la utilización de utensilios cuyos restos han llegado hasta la actualidad. Los molinos de impacto (en general de cuarcita) son muy diferentes a los de trituración, (en general de granito), pues los primeros servían para el machaqueo del cuarzo aurífero por golpeo o impacto. Los segundos debían servir para recoger el material ya machacado por los anteriores y molerlo o triturarlo hasta convertirlo en “harina” o fino polvo.
TERCIARIO
Ya he señalado que nos hallamos ante un tipo de explotación mixta en la cual se explotó un yacimiento secundario (terrenos blandos y arcillosos), beneficiado mediante el uso de la energía hidráulica. Estos terrenos blandos son los que geológicamente se conocen con El Terciario (período geológico de sedimentación). Son terrenos que lógicamente se han formado a expensas de la erosión de los mas antiguos (Paleozoico) que son los que contienen diques de cuarzo. Por medio pues de un proceso natural finas partículas de oro se extrajeron de los terrenos mas antiguos y compactos, para ser sedimentados en medio de arcillas, arenas y otros materiales no interesantes desde el punto de vista de la explotación aurífera. No obstante para extraer de estos materiales mas blandos cantidades de oro aprovechables, fueron necesarias lógicamente una serie de labores en las que la energía hidráulica desempeño un papel muy importante (canales, embalses, lavaderos,….)
5.-ÉPOCA ACTUAL.RESTOS ARQUEOLÓGICOS CURIOSOS .INTERROGANTES
Estas explotaciones se atribuyen generalizadamente a los romanos debido a que sus características encajan con las de otras explotaciones (Las Médulas p.e.) en las cuales incluso se han conservado inscripciones en latín y alguna alusiva a la excavación de un canal. En el caso de Castropodame, no hay referencia alguna de inscripciones de la época, pero yo encontré hace ya varios años algunos restos arqueológicos que los expertos en la materia (prof. Abello de la U. de León) catalogaron en su día como romanos. Creo que a la propia
Universidad de León fueron llevados algunos hace ya años (restos de molinos,“terrasigilata” y un “pondus”). Otro “pondus” hallado por mi en la zona de explotación (paraje de Llamillas entre Los Valles y la Encinal), se extravió en el año 2.009 al hacer una exposición en Bembibre (Casa de las Culturas) sobre estas explotaciones. Por otra parte, como se indicó anteriormente, hay constancia documentada del hallazgo en Castropodame en las primeras décadas del pasado siglo XX de una moneda de la época del Emperador Tiberio (primeras décadas del siglo I), aunque se encontró en las proximidades del río Boeza y no en el entorno de las explotaciones. Después daré más detalles sobre este asunto. Asimismo, tengo vagas referencias a alguna moneda hallada en el paraje de la Encinal.
Por otra parte, hay en las minas de Castropodame unas “curiosas piedras” (morteros los suelo llamar yo y molinos Roberto Matías), que por lo visto pasaron desapercibidas incuso para parte de la comunidad científica española hasta los años finales del pasado siglo XX. Por ello yo hablo de restos arqueológicos “curiosos”. Estas piedras (son cuarcitas por lo general) se hallan en la zona de explotación y también en las paredes de muchas de las casas actuales. En una primera impresión se observa que son rocas sobre las que se “machacó algo”, pero tampoco llaman en exceso la atención. Ello explica que durante siglos hayan pasado totalmente desapercibidas (parecen a menudo piedras normales) tanto por los vecinos como incluso y como he dicho, por algunos expertos. De hecho, en los años 80 del pasado siglo en la propia Universidad de León, no parecían tener un idea clara sobre su naturaleza. Hoy día supongo que esto habrá cambiado, sobre todo a raíz de los trabajos de investigación de Roberto Matías Rodríguez, quien ha realizado interesantes estudios sobre estas curiosas rocas que se hallan, según el mismo ha explicado, no sólo en Castropodame, si no también en otras localidades con minería romana de estas características, como por ejemplo, Llamas de Cabrera, Andiñuela, Pozos,……Por mi parte, lo único que puedo hacer es un seguimiento de las mismas intentando tenerlas siempre localizadas (las sitúo en un plano), con el fin de que quede constancia de las mismas, pues, lamentablemente, ahora que el vecindario sabe lo que son, ocurre que a veces desaparecen porque quizás hay quien piensa que son una especie de tesoro. Son un tesoro, si, pero no económico, sino histórico y cultural. En base a los datos de Roberto Matías Rodríguez , se trata de molinos o bases de molinos individuales (peso que oscila entre 13 y 35 kg.)
Un extremo que en estos momentos está pendiente de comprobar, es la presencia de lucernarios en las galerías que sería la prueba inequívoca de la presencia romana en la excavación de estas minas. Otra cuestión que cabe aclarar es el significado de la abundante presencia en las paredes de las casas actuales de fragmentos de molinos rotativos o de trituración. ¿Significa que se trata en todos los casos de restos de la época romana?. ¿ Son restos que proceden asimismo de épocas posteriores?.
Hay asimismo una curiosa “cueva”, (no tiene un nombre concreto); excavada en pizarras cuya interpretación, es al menos para mi una incógnita. Ver foto 1.
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NOTAS.
Quiero agradecer a Roberto Matías Rodríguez, la lectura y revisión del borrador de este texto, con el fin de corregir en el mismo esos “cambios sueltos”, que siempre aparecen en la investigación y en la redacción de los artículos.
1.-Las Ordenanzas de la villa de Castropodame, del año 1.779, se hallan en el Archivo Histórico Municipal de Castropodame. Caja Nº 1. En el capítulo 33 de estas se habla del agua de Peñafurada. Hay algún documento mas (cuentas del año 1782), que habla del agua de Peña Furada. (Arch. Diocesano de Astorga).
2.-Archivo Histórico Municipal de Castropodame. Caja nº 9.censo año 1.875. Hay en este mismo archivo datos referentes al año 1.871, que también citan a la calle de Las Minas como una de las del pueblo.
3.- Archivo Histórico Municipal de Castropodame. Correspondencia del año 1.880.
4.- Dato tomado de un libro publicado en 1.883 por el Ingeniero D. José maría Soler y que se titula: “Reseña geológica y minera y catálogo de minerales, rocas,etc..de la Provincia de León.”(Dip. provincial).
5.-Libro titulado. “SEVERO GOMEZ NÚÑEZ.UN TECNICO REFORMISTA PARA EL BIERZO- (1859-1939)”. Instituto de Estudios Bercianos. Año 1.996.Miguel José García González.Pag.207.Nota 14.
6.-El dato lo cita Roberto Matías Rodríguez, en un articulo publicado en la revista ESTUDIOS BERCIANOS (Nº 30 -31. Pag. 56) .Ponferrada , Junio de 2.006.
7.- Con los datos de campo, elaboré dos sencillos informes, que no obstante no he publicado aún.
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Estupendo reportaje sobre la mineria del oro de Castropodame.
ResponderEliminarAl fin nos estamos dando cuenta de los valores que atesora nuestro Bierzo, en concreto y en este caso Castropodame, con una de las minas más interesantes de oro de España. Buen reportaje de Rogelio quién ya hace muchos años que entendió estos valores y recopiló la historia de su pueblo. Que no decaiga y consigamos más adeptos a estos "vicios".
ResponderEliminarMagnífico reportaje. He disfrutado de su lectura, y he aprendido un poco más de la historia del Bierzo en lo referente a la minería del oro, por parte de los romanos, en nuestra tierra. Animarte a continuar con tu labor de investigación y, sobre todo, en darla a conocer. Un saludo.
ResponderEliminarGracias por tu ánimo y esperamos seguir ofreciendo más información sobre nuestros tesoros geológico y minerales.
ResponderEliminarUn saludo Ángel